Plato, Magdalena — Durante los últimos días, el exdiputado Rafael Noya realizó un recorrido por los municipios de Plato y Ariguaní, compartiendo de cerca con comunidades, líderes y familias que lo recibieron con afecto y entusiasmo.
En la cabecera municipal de Ariguaní, El Difícil, Noya acompañó a su esposa a la tradicional Noche de Polleras, una celebración cargada de música, color y tradición. Allí tuvo la oportunidad de dialogar con habitantes que aprovecharon la ocasión para expresar preocupaciones, especialmente sobre el mal estado de las vías y la necesidad de impulsar el turismo local como motor económico.
Posteriormente, su recorrido continuó por Plato, donde también fue recibido por ciudadanos que le manifestaron respaldo a su proyecto político. El ambiente fue cálido y propicio para escuchar ideas, propuestas y sueños de quienes habitan estos territorios.
“Lo que estamos haciendo es reencontrarnos con nuestra gente, escucharlos de frente, sin discursos prefabricados. Aquí lo que importa es que la voz del pueblo sea parte de las soluciones”, señaló Noya durante uno de los encuentros.
Este tipo de acercamientos, cargados de simbolismo y cercanía, marcan lo que parece ser un nuevo paso en su camino político, basado en el diálogo directo y el compromiso con las regiones.